Cómo mejorar el sedentarismo en nuestras vidas

Todos sabemos que el sedentarismo perjudica bastante la salud de quien lleva a cabo este tipo de vida. La mayoría de la culpa la tiene las horas que pasamos sentados a diario en el trabajo.

Hoy el día son muchos los trabajos en los que pasamos gran parte del tiempo sentados, y esto es un riesgo para la salud.

Debemos hacer un enfoque global de cómo afrontar este problema. Además de reducir el tiempo que estamos sentados, debemos tener en cuenta el cuidado de la alimentación y el ejercicio.

¿Cómo prevenir el sedentarismo?

Debemos de tomar conciencia de que si pasamos 8 horas en el trabajo sentados y cuando llegamos a casa invertimos otras dos o tres horas descansando, prácticamente hemos pasado medio día sin movernos.

Este hecho hace haya un impacto muy negativo en la salud. Si queremos poner solución a este hecho, debemos pensar cómo reducir el número de horas que estamos sentados.

Una buena opción sería disponer de mesas de trabajo con una altura adecuada para que podamos trabajar de pie y no estemos más tiempo de la cuenta sentados. Esta opción evitará que pasemos muchas horas sentados.

Si no disponemos de esta mesa, podemos programar el día para no pasar demasiadas horas sentados. Por ejemplo, poniendo alarmas que te hagan levantarte o salir a dar un paseo mientras te encargas de otra función diferente.

De este modo, evitamos que los músculos se endurezcan y que pierdan fuerza y elasticidad.

Evitar pasar mucho tiempo seguido sentado

Este factor depende mucho del trabajo que tengamos cada uno, pero si podemos alternar tareas en las que estemos sentados con otras en las que estemos en movimiento o de pie, sería lo ideal.

Todo lo que sea evitar pasar muchas horas seguidas sentados en una silla, nos hará bien.

Hacer ejercicio antes o después de trabajar

Una idea adecuada para paliar estas horas que pasamos sentados en el trabajo es ir andando o en bici a trabajar. Al igual que subir las escaleras o bajarlas en vez de usar el ascensor u otras comodidades.

Hacer deporte ayuda al sedentarismo de la oficina, además hace las horas más productivas y activa tu cuerpo. Para ello es recomendable hacer deporte antes o después de ir al trabajo.

Puedes llevar a cabo el ejercicio al aire libre o seguido por un entrenador personal en un gimnasio.

Una buena opción sería buscar un deporte que os guste y así el practicarlo diariamente o con asiduidad no será un gran esfuerzo.

La alimentación también es importante

Aunque todos debemos tener cuidado con nuestra alimentación y cuidarnos todo lo que sea posible, las personas que tienen una vida sedentaria deben cuidarla aún más.

Si no hacer ejercicio es un factor de riesgo, comer mal sería sumar un factor bastante importante.

Pasar muchas horas sentados y trabajando a veces invita a comer mal: comidas rápidas, snacks, bebidas azucaradas, etc. Lo que debemos de hacer es sustituir todos esos alimentos por comida más saludable que nos ayude a sentirnos con mejor salud.

Algunos hábitos saludables serían: beber mucha agua y evitar los refrescos, comer snacks saludables como sería la fruta en la merienda, reducir los alimentos procesados, comer diariamente frutas y verduras, etc.